LA VIDA FRENTE A LA MUERTE (completada)






















LA VIDA FRENTE A LA MUERTE

Cuando me refiero a los problemas que tenemos los ancianos frente a la trampa más peligrosa de la ancianidad consciente, afirmo que se trata principalmente de la depresión.

Aquellas personas que han llegado a una ancianidad avanzada, a la que se suele dominar como la cuarta edad, la enfrentarán de dos maneras bastante radicales:
  1. La demencia Senil, que puede adquirir una gran variedad de formas y grados
  2. Una conciencia clara y una mente despierta. Esta segunda situación implica una gran variedad de aspectos y grados.

Ignoramos mucho sobre la Demencia Senil. Este oscurecimiento de la mente resulta muy misterioso para aquellos que rodean a este tipo de ancianos.
El mismo proceso de la demencia impide una comunicación con los ancianos, incluso cuando ellos puedan tener momentos esporádicos de lucidez, como sucede en muchos casos, y cuando los tipos de enfermedad mental que padecen aún no están muy avanzados.

Todo nos lleva a pensar que ya no se dan cuenta de que han entrado en un proceso terminal de la vida y que sus momentos de depresión, o su depresión continua, son una especie de “aburrimiento” al no poder relacionarse con la contingencia diaria o porque viven un mundo de imaginaciones ignoto para nosotros.

Por tanto no me voy a referir a este aspecto de la ancianidad que para mí es un misterio psicológico.

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En cuanto al segundo caso, creo tener una cierta claridad ya que de alguna manera pertenezco al mismo y he podido analizar casos diversos bastante coincidentes con todas las variaciones derivadas de las experiencias y personalidades de cada uno.

Desde luego la Depresión frente a la muerte se puede dar no solamente en los ancianos de la cuarta edad, sino que puede aquejar mucho más enfermizamente a los de edades menores, sobre todo a partir de su jubilación laboral o a la de sus actividades debido a impedimentos de salud.

Entre los ancianos que conservan una perfecta lucidez se dan dos casos principales para que la Depresión se convierta en su problema principal.
Sobre todos aquellos que son aquejados de algún tipo de enfermedad continua y aquellos que padecen una enfermedad terminal.

El grupo más reducido y que debería sentirse más afortunado son aquellos que tienen una salud estable sin eliminar las debilidades propias de una edad avanzada, pero que se consideran como males menores incluso por el mismo anciano. Situación que le suele dar la sensación de estar sano.

El problema generador de continua Depresión en toda esta gama de ancianos es que se sienten
lógicamente COMO ENFERMOS TERMINALES porque se dan cuenta que, aún en el mejor de los casos, su vida se “acaba” muy pronto.

Esa depresión fundamental se suele agravar con largos repasos mentales a su vida anterior, rememorando sus errores, frustraciones, y relaciones íntimas mal llevadas…

La Depresión tratada por especialistas, psicólogos, geriatras y médicos, puede ser aliviada técnicamente con mayor o menor éxito por medio de tratamientos combinados con medicamentos.
El problema principal reside en que en nuestro país son escasas las personas que tienne acceso a esta posibilidad.
En otro aspecto es raro que las personas cercanas a los ancianos adviertan que gran parte de los problemas del anciano, incluso los físicos, provienen de una aguda Depresión. Se suelen atribuir a causas tan difusas como “cosas y sucesos propios de la ancianidad”.

Frente a la situación anterior algunos ancianos tratan de solucionar su problema emocional ensayando diversos fármacos y con mucha frecuencia a través del alcohol o drogas populares
tales como la marihuana y otros tipos. Estos recursos conducen indudablemente a un alivio muy temporal y a la dependencia de drogas o fármacos.

El aspecto más maligno de la Depresión es que se retroalimenta a sí misma. La persona sumergida en la Depresión la aumenta continuamente con hechos cotidianos que casi siempre tienen escasa importancia pero que ellos en su estado de perpetua angustia magnifican y dramatizan , a veces incluyendo a su entorno familiar.

Por familiar que se presente este fenómeno de la Depresión en nosotros los ancianos me parece antinatural y absolutamente destructivo de la vida de una persona. Algo creado artificialmente , aunque volvamos siempre a ello,por la cultura, ese invento ciudadano de tiempo inmemorial. Estudiando el desarrollo de la vida natural, de los mismos animales (no olvidemos nuestra animalidad real) y de los seres humanos que aun viven una vida primitiva, se extinguen viviendo su VIDA hasta el último momento.

La proyección de la muerte pienso que proviene de la “herencia”. Los descendientes estaban obsesionados desde el momento que se creo la “acumulación” generada por la vida de asentamiento territorial o patriarcal, en que el patriarca acumulaba algo que se consideraba deseable “bienes”, y cuando el patriarca declinaba los cercanos, como buitres esperaban los momentos de la repartija. Esto debió ser la semilla de la obsesión de la muerte próxima en los ancianos impulsado por aquellos que le rodeaban..

Más tarde la religiones subrayan la importancia de la muerte, porque esperan algo del botín que proporcionará el muerto o el que temiendo la muerte les reparta sus bienes o construirálos monumentos religiosos qque le permitirán pasar a la posteridad.

No olvidemos que nosotros los de la plebe, siempre reproducimos en medidas ridículas las actuaciones ye idiosincrasia de nuestras veneradas élites de Poder.

Observando la documentación etnográfica de los pequeños grupos humanos que viven una vida muy primitiva que hace recordar un cierto entronque con la vida multimilenaria de los seres humanos “originales”, se advierte que su vida se desarrolla sin la preocupación de la muerte. La muerte “sobreviene” como una circunstancia más de la VIDA. Sin duda se lamenta cuando sucede y algunas comunidades la celebran.

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La Vida es algo puntual en tosas sus etapas. Nuestras mismas formas culturales tratan de disimular su fragilidad hipócritamente incluso en los casos de guerra. Nos han creado el mito que aunque todos los demás mueran a uno no le sucederá.

Los primitivos , es decir aquellos que viven sumergidos en la Naturaleza, probablemente no piensan en la fragilidad de la Vida, sino que la sienten. Eso les hace cautos y capaces de reaccionar instantáneamente en caso de peligro.
Nosotros los ciudadanos, aquellos que tememos y pensamos en la muerte, estúpidamente casi en cada momento nos exponemos a ella o dejamos que el entorno la amenace sutilmente, desde los alimentos en que nuestro instinto natural ha sido borrado por la civilización, hasta frente a los mil peligros tan presentes en las diarias “crónicas rojas” que siempre “serán para los otros”, no para mí.

La espontaneidad de la vida es lo que nos proteger frente a la muerte. No solo en nuestra vida cotidiana sino frente a los procesos artificiales creados por la Cultura imbuida por la comunidad humana en que nos desarrollamos

En el caso de los ancianos es el obsesivo convencimiento de su propia muerte, que en realidad, aparte de los casos extremos, es tan aleatoria como lo era en todo el curso de sus vida.
Esa obsesión es la que crea y fomenta en ellos la DEPRESIÓN.
Si mañanas o en un rato puedo morir, ¿qué sentido tiene realizar algo ? Esto es como vivir en un suicidio permanente.

En todas las épocas han existido personas realistas, esos que llamamos grandes sabios, que han analizado profundamente los problemas que desmañadamente vengo analizando. Generalmente sin grandes discursos, como sucede en aquellos que han llegado a una sabia comprensión. Ellos crearon este lema que para algunos puede resultar tonto:

AQUÍ Y AHORA

Aprender a vivir el momento.
Disfrutar de el momento.
Gozar del momento.
Dar gracias del momento. El creyente a la divinidad que acepte o venere. El no-creyente al mismo hecho de estar vivo. Saber agradecer sin distinción aquello que nos agrada o desagrada, ya que nadie es capaz de distinguir si aquello que le parece “malo para él” será a la larga, una bendición.

Existen muchas formas de meditación. Una de ellas es la que se llama meditación Zen. No importa que para la mayoría resulte algo exótico. Realmente es sentarse, por un momento, borra de nuestra mente todo, dejarla en blanco y por un instante “sentirse vivo”.
Resulta difícil!!!! dirán muchos. Menos difícil que pensar Pronto moriré!

QUIEN LO LOGRE HARÁ TRIUNFAR EN SI MISMO LA VIDA SOBRE LA MUERTE

¡SE LO DESEO!!!!

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EXPERIENCIAS

Las anotaciones que van a seguir a continuación son una breves notas sobre las experiencias de algunos ancianos para mejorar su vida cotidiana y que parece, según lo que afirman ,les ha dado buen resultado

Algunas de estas experiencias coinciden con los consejos que dan los Psicólogos y geriatras, pero tienen la particularidad que se trata de algo re

Ciertamente se trata de experiencias personales practicadas por cada anciano según su capacidades físicas, ambiente familiar y deseos de alcanzar una vida equilibrada. Yo las he codificado a mi manera para exponerlas.

MINIMALISMO.

Sin caer en el síndrome de Diógenes, los ancianos tienen la tendencia a “conservar” el pasado sea en objetos, ideas, manías….
Confunden conservación con la vida misma.
No quieren aceptar que todo aquello que les rodea y que ellos mismos captan ya es inútil y algo lo que no se relacionan realmente, por lo tanto resulta una carga inútil que además no les permite tener una visión sobre el mundo real en que viven que es muy diferente de cuando aquellos objetos, ideas o concepciones tenían validez. Se trata de una carga muerta, que al anciano le dificulta centrarse en gozar del instante en que vive con sus cosas positivas y negativas como siempre ha ocurrido en todo dentro desarrollo de las culturas que son dinámicas.

El Minimalismo no es pobreza ni miseria,en cierta manera, es volver a lo natural con la mentalidad de nosotros los seres humanos del siglo XXI. Es la practica de una sobriedad que simplifica nuestras vidas (el resto de nuestra vida) librándonos de todas aqquellas cosas inútiles que ni siquiera son ya recuerdos románticos sino un tipo de basura.


Yoga Las posiciones yoga son muy útiles para flexibilizar poco a poco las coyunturas dolorosas o demasiado tiesas. Tiene la ventaja que no requieren un esfuerzo rápido sino que un proceso lento y acomodado a la situación de ancianos que al ir limitando sus movimientos se van entorpeciendo más progresivamente.
Además dan un espacio de meditación, tipo de intentra dejar “la mente en blanco” por algunos momentos.
Además se encuentran en Internet multitud de imágenes a imitar y pequeños cursos de iniciación.


Tai Chi para los ancianos que tiene una buena movilidad o, por lo menos aceptable el Tai Chi es excelente para mantenerla y mejorarla.
En Internet, especialmente en Youtube, se encuentran excelentes tutoriales a imitar. Recomiendo sobre todo las más suaves y con pocos movimientos.

Baile Especialmente para los ancianos que tengan movimientos fáciles, ya conozcan pasos de baile o bien puedan inspirarse en la músicas para bailar, este ejercicio es muy conveniente sobre todo si tienen pocas posibilidades de caminar diariamente durante al menos media hora. Media hora de baile les manteendra´en buenas condiciones físicas
Bailar descalzo resulta muy importante al activar la reflexologia de los pies.

Ejercicio físico contra excesivo reposo La experiencia de numerosos ancianos demuestra que la disminución del ejercicio físico es la causa de numerosos problemas en las articulaciones, atrofia muscular progresiva,falta de equilibrio, posibles caídas domiciliarias, que son las más frecuentes, o fuera del hogar.
Muchas personas cuando están jubilándose o considerándose jubiladas adoptan una vida que ellos denominan de “reposo” lo que realmente es un “sedentarismo que les condena a una serie de problemas físicos que suelen derivar en enfermedades y una apertura para la “demencia senil” en su importante gama de manifestaciones.
Omito el tratar de caminar diariamente durante unos treinta minutos, ya que es algo muy recomendado médicamente a los ancianos.


La web Muchos ancianos rechazan Internet y todo lo relacionado con ello. Esto ocurre en todas las clase sociales, aunque en la mayoría de los casos podrían aprender ,al menos parcialmente, por los hijos y nietos.
Ciertamente aquellos que han tenido una educación formal deficiente tienen escasas posibilidades para acceder a Internet como anteriormente la tenían para la lectura y los libros
Entre aquellos que rechazan Internet y podrían aprender a manejar la información de todos los tipos a la que pueden acceder, existe el mismo problema al de los antiguos analfabetos, les da vergüenza aprender y mostrar su desconocimiento.
Existen aquellas personas que les es posible acceder a Internet porque lo han manejado cuando eran más jóvenes, entre ellos los “intelectuales”, que juzgan que su nivel se deteriora, por ejemplo, participando de las Redes sociales, la búsqueda de videos videos que les amplien su mundo o de libros….

La versatilidad y el cambio continuo de los diversos programas y plataformas de Internet, ciertamente yo las considero una excelente gimnasia mental para los ancianos que debería promoverse por los familiares y amigos más jóvenes.


Escribir Existe un tipo de ancianos a quienes escribir, sobre algo les produciría una gran satisfacción. Escribir sobre su vida, sus experiencias o aquellas opiniones que el mundo en que han vivido les había sugerido siempre, pero que no habían querido o podido expresar,


Relacionarse Los geriatras insisten mucho en que los ancianos deben esforzarse en mantener na vida de relación. Para lograrlo es necesario que no se empeñen en comparar el pasado en que vivieron y se relacionaron con el presente que están viviendo.
Es muy posible que el cambio cultural no les guste, ni les agrade. Eso será su opinión respetable. Tratar de imponerlo como modelo en sus relaciones familiares o de amistad es reducir las relaciones solamente a personas parecidas a su edad o mantenerse en un aislacionismo rencoroso. Lo importante para el anciano es escuchar, observar, a lo más jóvenes que él y solamente exponer su visión de la vida si se lo piden. De otra manera ahuyentará las relaciones con personas más jóvenes disminuyendo notablemente su capacidad de relación.


Descartar rememoranzas del pasado y futuro El pasado es algo que sucedió y que no se puede cambiar. Es algo ya muerto que no nos permite vivir el presente que es lo único que está vivo.
Ciertamente el pasado tiene un aspecto que fue una una experiencia que si nos llevó a errores ahora puede ser la advertencia para evitar caer en situaciones semejantes. Por el contrario si en el pasado tuvimos experiencias positivas o felices siempre podremos repetirlas o crear en nuestras actuales circunstancias de ancianos, algo semejante.

El Futuro tampoco está en nuestras posibilidades y resulta más incierto que nunca, por lo tanto tampoco uno se debe perder en posibilidades que nosotros mismos creemos que son solamente ensueños, una droga mental que nos aleja de nuestra realidad.

NUESTRA REALIDAD en ocasiones puede ser muy penosa, en otras nosotros mismos la hacemos penosa. En ese Aquí-Ahora es donde tenemos que concentrar toda nuestra energía. Si lo juzgamos desagradable, usar toda nuestra creatividad, ingenio, fuerzas que nos queden para mejorarlo. Si lo consideramos aceptable, bueno o placentero concentranos en gozar cada momentos, alegrarnos y crear nuestra volátil felicidad del “momento”.

¿Mascotas o compañeros animales? Actualmente se considera, casi científicamente, lo positivo que enfermos y ancianos tengan cerca de ellos un animalito.
Pienso que resulta excelente si se trata sobre todo de animalitos jóvenes y llenos de vida. Existe como un círculo de vitalidad que se comunica entre estos compañeros de nuestra peregrinación y nosotros mismos.
Cada vez se profundizan más los estudios sobre nuestros compañeros caseros y se descubre una riqueza que antiguamente solamente se intuía

Sol e intemperie. Entre los ancianos existe la tendencia, como he ya he señaladom al sedentarismo. Een ocasiones debido a graves limitaciones físicas, pero a no ser las insuperables el esfuerzo del anciano para mantener algún tipo de actividad, aunque ello le cause dolores y molestias se compensa a la larga con notable mejoría Sin embargo existe un tanto por ciento muy elevado de ancianos que ellos mismos se imponen el sedentarismo. Esta tendencia es tan fuerte en los ancianos y quienes les rodean que frecuentemente en casas de reposo se les mantiene el mayor tiempo inmóviles distrayéndoles con la televisión.

Indudablemente que el sedentarismo es en los ancianos con un índice medio de sanidad es el generador de múltiples achaques o agravación de los mismos como es el caso comprobado en los tipos de artritis y varicosos

Vestido y calzado.

La persistencia de los ancianos en continuar vistiéndose y calzándose como cuando eran jóvenes y desarrollaban actividades que ahora no realizan resulta inadecuado para su salud de ordinario porque no están adecuadas esas ropas y calzado a sus necesidades actuales de tener ropa que les permita mejores movimientos, no les recargue o sea demasiado rígida. En muchas ocasiones el mismo calzado en personas diabéticas les ocasionan llagas y heridas.
En una ocasión un geriatra decía, les digo a mis ancianos que debían adoptar las formas de vestirse de sus nietos o por lo menos imitarlas, no para simular ser jóvenes, sino porque suelen ser más adecuadas que las que ellos usaron durante muchos años.

Ventilación y calefacción Los ancianos son generalmente friolentos, por tanto tratan de evitar una adecuada ventilación de las habitaciones en que pasan mucho tiempo. Algo práctico para ellos es ventilar, al menos cuando aún están acostados, lo que les aleja del miedo a resfriarse.
La calefacción excesiva puede ser otro problema, pero es algo bien documentado

Alimentación Respecto a la alimentación los ancianos tienen fáciles referencias ya por su atención médica, como por informes de prensa y radio al respecto.
El peligro mayor en la alimentación reside en que con frecuencia no quieren seguir los consejos dietéticos rememorando siempre sus hábitos de juventud y de goce alimentario o bien estos son demasiado costosos para sus capacidades económicas. Tiene que estar muy atentos al consumo de grasas, azucares, frituras , sal … y consumir los alimentos de efecto negativo en cantidades mínimas o no consumirlos.

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, Nota. En este artículo se ha utilizado siempre la forma masculina “anciano” solamente por comodidad gráfica, no por discriminación.
Por lo demás casi todas las reflexiones creo que son valederas para ambos sexos,, aunque sin duda existen peculiaridades femeninas diferente que no he explorado por falta de conocimientos de primera mano ya que esta Reflexión no es libresca sino basada en experiencias.






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